La publicación del nuevo dato oficial de pobreza reavivó el debate sobre su medición, luego de que la UCA advirtiera que la baja en la tasa reportada por el Indec responde más a factores técnico metodológicos que a una mejora real pronunciada. El Observatorio de la Deuda Social (ODSA-UCA) de esa universidad no desconoce los avances pero sostuvo que los números sobrerrepresentaron el alivio social.
De acuerdo al informe del Indec, las tasas de pobreza e indigencia en los principales centros urbanos durante el primer semestre de 2025 se ubicaron en 31,6% y 6,9% de la población, respectivamente. Se trata de una reducción significativa frente al 52,9% y 18,1% registrados un año atrás.
“Siguiendo la metodología del Indec, la pobreza en el segundo trimestre de 2025 habría sido de 31,8%. Esto significa una baja muy importante de 9,5 puntos porcentuales desde el segundo trimestre de 2023. Sin embargo, si observamos la estimación con corrección de captación, la pobreza también se habría reducido, pero ‘solo’ en 2,1 puntos porcentuales, desde 33,9% en dicho período”, señaló el ODSA-UCA en su último estudio.
“Esto sugiere que existió una baja real de la pobreza monetaria bajo la actual gestión, producto de la baja de la inflación, cambio en los precios relativos y fortalecimiento de la AUH-Tarjeta Alimentar. Lo mismo se observa a nivel de la tasa de indigencia (caída de 1 punto porcentual)”, precisó.
“No obstante, en ambos casos, la caída en las cifras oficiales con respecto al período anterior al ajuste estaría sobreestimada por la medición, de tal forma que es posible que en torno a tres cuartas partes de la caída desde los niveles de 2023 se deban a un efecto estadístico”, agregó.
Más en detalle, el ODSA explicó que la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), herramienta central para medir la pobreza y la indigencia monetaria, releva los ingresos personales y familiares de los hogares y los compara con el valor de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y la Canasta Básica Total (CBT), actualizadas por el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec.
Según la UCA, este mecanismo presenta fenómenos conocidos de subregistro y de no respuesta: muchas personas desconocen o no declaran todos sus ingresos, lo que deriva en una subestimación del ingreso real de los hogares. Ese fenómenos tiende a sobreestimar las tasas de pobreza e indigencia.
Fuente: Infobae






